EUROPA 1820


Durante el conflicto armado, las colonias americanas seguían siendo proveedoras de materias primas y mercados a favor de España, también aumentaba la presión fiscal sobre las tierras americanas. La revolución industrial no se había desarrollado en España, y sí en Inglaterra, Francia y los Países Bajos, quienes tuvieron un intenso comercio con América y tomaban ventaja de ese trance. Por otro lado, la guerra y el liberalismo que se impone tras la derrota de Napoleón, hacen caer las barreras proteccionistas, y la confianza en el Estado español se tambalea.


En España, el 1 marzo de 1820 el coronel Rafael Riego, se levanta contra la monarquía en Sevilla y se establece una corriente liberal revolucionaria que obliga al rey a devolver la vigencia de la Constitución de 1812 y toma medidas contra el absolutismo. El coronel Riego deja las Cortes instaladas en Madrid un 9 de julio de 1820, los efectos sociales de esa re-instauración de la Constitución fue la expulsión de la compañía de Jesús, la supresión del fuero eclesiástico, los señoríos, las ordenes monacales y la inquisición; mientras que en Nueva España se reduce el diezmo al 50% y se ordena la venta de propiedades urbanas de la Iglesia.[1] En el plano político, esto acelerará el proceso de emancipación de las colonias de América.
Esto es, el coronel Riego proclamó el retorno de la Constitución de 1812, y restableció en su cargo a las autoridades municipales constitucionales. Riego se convirtió en el principal instigador del pronunciamiento liberal. Se fueron sumando algunas ciudades como: la Coruña, Oviedo, Murcia, Zaragoza, Barcelona y Madrid. Por lo que Fernando VII hubo de consentir. Juró la Constitución a la fuerza y se convirtió en el primer monarca constitucional de la Europa del siglo XIX.
Lo anterior inquieta a los habitantes de América pues la situación social era como sigue: el equilibrio de poder continúa siendo el borbónico, una administración funcionarial con los cargos al mejor postor, una Iglesia y el dominio de las oligarquías que compran y venden oficios. Cada vez más, los criollos veían a España como un obstáculo que impedía el crecimiento económico, particularmente por la prohibición del comercio interregional y desde luego su ascenso a las posiciones de poder; para lograr sus objetivos ya no dudarán en violentar la organización política colonial.
Conocemos que esas condiciones, propiciaron el derrotero que siguió la guerra de independencia en México, hasta los últimos días de tan cruenta lucha ese año de 1820, fecha en que solo quedan algunos núcleos rebeldes, sobre todo en la Sierra Madre del sur y en Veracruz.


1 México un pueblo en la historia, Tomo II; Semo, Enrique; Edit. Nueva imagen, México 1983, pág. 74.

1 comentario:

Sofía dijo...

Hola Tio! Yo de historia se muuuuy poquito, asi que me voy a dar una vuelta de vez en cuando.

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